A finales de la década del 90 todos esos mayoristas que en general publicaban sus ofertas en la sección de deportes del diario Clarín de los domingos, terminaron cerrando y dejando atrás toda una época, debido a la feroz batalla de precios entre los importadores que terminaron vendiendo directamente a los comerciantes minoristas.
Ese gran cambio en las costumbres comerciales, generaron la pérdida de esa referencia de precios de oferta que generaban los avisos en Clarín y dejaron al comerciante minorista con menos fuerza para negociar, pues solo podía comparar los precios de aquellos proveedores que podía visitar.
La naturaleza misma del tamaño del mercado fue haciendo que los importadores al no poder atender a cada uno de los pequeños comerciantes dieran lugar nuevamente a los mayoristas de juguetería.
Al principio de esta nueva etapa los mayoristas no tenían ningún medio definido para atraer a nuevos clientes.
Últimamente internet está empezando a influir en las decisiones de compra de los comerciantes minoristas generando nuevamente una activación en la competencia de los precios.
Si bien muchos mayoristas tratan de escapar a esa competencia, de apoco se acoplan pues no pueden ignorar al echo de que cada vez más comerciantes miran las ofertas de sitios como La Guía del Mayorista Juguetero, donde los mayoristas publican sus ofertas con precios.
Si bien este fenómeno activa la competencia, al mayorista le conviene , pues le da la posibilidad de ampliar enormemente su clientela, dado que diariamente comerciantes de todo el país entran a ver y le dan la posibilidad de elegirlos.
Estamos en el inicio de una nueva etapa maravillosa que trae grandes posibilidades al comercio.
La competencia pone todos los sentidos a funcionar , genera crecimiento y le hace bien a todos.
